¿Sabes que un animal de compañía estimula la imaginación y enriquece la personalidad de los niños? 

En general, la convivencia de los peques con un animal doméstico resulta beneficiosa para su carácter, autoestima e integración. Además, se acostumbran a compartir, a dar y recibir cariño, a sacrificarse por su bienestar y a asumir responsabilidades haciéndose cargo de su higiene o su alimentación.

La relación de dependencia que se establece con su cuidado, hace que el niño crezca como persona. La afectividad que su mascota provoque en sus sentimientos y en su vida será reflejo de su futura forma de ser y de actuar cuando sea una persona adulta. 

Si te decides a adoptar una mascota, no debes olvidar los posibles problemas de salud que las mascotas pueden generar a los niños: alergias, parásitos, virus… Por eso siempre deberás tomar medidas de prevención básicas para vuestras mascotas, como una buena higiene, vacunas y controles periódicos. Esto será suficiente en la gran mayoría de las ocasiones y permitirá que el niño se desarrolle emocionalmente junto a su mascota.

Pero, ¿cuál es la mascota ideal? 

La elección de una u otra mascota dependerá de sus gustos o afinidades, aquella que mejor se adapte a su personalidad y carácter: un gato, un perro o un hámster son los más habituales, y todos y cada uno de ellos generan instinto y sentimientos de protección.

Para tu peque ¿cuál es su animal preferido? ¿tenéis mascota en casa?