Saludable y Natural
Alta protección solar de amplio espectro UVA - UVB formulada para las pieles más sensibles de bebés y niños mediante una doble barrera de dióxido de titanio y óxido de zinc que actúan como un espejo, reflejando la radiación del sol alejándola de la piel. Y, enriquecida con aceite de almendras dulces, jojoba, arroz y gardenia para preservar, nutrir y regenerar la piel de los dañinos efectos de los rayos solares.
Adecuado para todo tipo de piel, incluida la atópica
Para toda la familia
Cara y cuerpo
Protección solar 100% mineral
Textura ligera con acabado invisible no graso
Humectante
Vegana
Dermatológicamente testada
Hipoalergénica
Libre de gluten
No nanoparticulas
Amigable con los corales
100 ml
Natural and Organic 99,1% certified ISO NATURAL 16128
Cómo usar
Antes de tomar el sol aplicar sobre la piel de modo uniforme y generosa que cubra la zona a proteger, masajear hasta obtener un acabado invisible. La aplicación de poca cantidad reduce su protección. Repetir con frecuencia, especialmente tras sudar, bañarse o secarse.
Propiedades
La combinada acción de sus activos vegetales a base de aceite de almendras dulces, jojoba y arroz ricos en ácido linoleico, vitamina E y ácidos grasos Omega 3 y 6 actúan como antioxidante natural, impiden la pérdida de humedad de la piel hidratándola en profundidad a la vez que la calman y reducen el daño celular causado por los radicales libres. Y, gracias a las propiedades protectoras, antioxidantes y cicatrizantes del aceite de gardenia la convierten en la pantalla perfecta contra las quemaduras solares en la piel más sensible de bebés, niños y de toda la familia.
Ingredientes
Ingredients/INCI: Zinc Oxide, Caprylic/Capric Triglyceride, Aqua (Water), Titanium Dioxide, Prunus Amygdalus Dulcis (Sweet Almond) Oil, Glycerin, Propanediol, Oryza Sativa (Rice) Bran Oil, Polyglyceryl-2 Dipolyhydroxystearate, Polyglyceryl-3 Diisostearate, Simmondsia Chinensis (Jojoba) Seed Oil, Gardenia Florida Oil, Aluminum Hydroxide, Stearic Acid, Sodium Benzoate, Potassium Sorbate.
Non-nano, Reef Friendly, Sin Perfume
Nuestros productos no contienen derivados del petróleo, siliconas, sulfatos, colorantes, aceites minerales, Peg’s, ftalatos, y están formulados con conservantes sin parabenos.
¿Lo sabías?
¿Qué es un filtro solar químico y qué es un filtro solar físico?
Los filtros solares químicos penetran en la piel, y funcionan absorbiendo la energía UV y convirtiéndola en calor. Los filtros solares físicos funcionan como un espejo, reflejando la radiación del sol lejos de la piel.
Un protector solar mineral (físico) combina dióxido de titanio y óxido de zinc. Un protector químico combina ingredientes como oxybenzone, octinoxate/ethylhexyl methoxycinnamate, homosalate, octisalate o octocrylene.
Los filtros físicos por su efecto pantalla son los adecuados para aquellas personas que tienen la piel sensible o con tendencia a la dermatitis.
¿Qué es el SPF y cómo funciona?
SPF significa Factor de Protección Solar.
Indica el tiempo durante el cual la piel está protegida contra el sol.
La piel comienza a quemarse, de promedio, después de 5 a 10 minutos al sol sin ningún filtro solar. La protección solar SPF 30, por ejemplo, amplia ese tiempo durante 5 minutos x 30 (150 minutos) antes de comenzar a quemar.
El tipo de piel, ubicación, época del año, nadar, sudar excesivamente o cómo se ha aplicado el fotoprotector son algunos de los factores que afectarán al nivel de protección.
El SPF sólo garantiza el tiempo de efectividad de la crema o loción frente al sol, no la cantidad de tiempo que puede permanecer la piel expuesta.
Consejos Carelia
Los menores de 6 meses no deben exponerse al sol, su piel es muy sensible e inmadura, sin capacidad de defensa frente al sol.
Protegerles con ropa adecuada, la cabeza con un sombrero de ala ancha y los ojos con gafas de sol que bloqueen los rayos UVA y UVB. Extremar las precauciones en las partes más sensibles al sol: cara, cuello, cabeza, hombros, escote, orejas, manos y empeines.
La mejor hora para bajar con los niños a la playa es a primera hora de la mañana o por la tarde cuando ya ha bajado el sol. Evitar la exposición entre las 12h -16h. la intensidad de radiación solar es máxima.
En la sombra o bajo una sombrilla también se ha de utilizar protección solar, sobre todo si alrededor hay superficies que reflejen la radiación (agua, arena, asfalto…).
Aplicar generosamente la crema solar hasta su completa absorción. Volver a aplicar al menos cada 2 horas y después de nadar, sudar o secarse.
Los fotoprotectores también se deben utilizar incluso en días nublados, las radiaciones atraviesan en un 90% las nubes.
Tener en cuenta que las radiaciones sobre la piel aumentan con el agua, la nieve (80%), la arena (25%) y la hierba (10%) porque las reflejan haciendo que se sumen sus efectos.
El riesgo de quemaduras aumenta con la altitud, cada 300 m. de altura aumenta un 4% el poder eritemático de las radiaciones ultravioletas.
No utilizar protectores solares abiertos desde el año anterior, pierden eficacia. Y, evitar largas exposiciones al sol.
Si bien, necesitamos la beneficiosa y necesaria energía del sol para nuestro organismo porque estimula la síntesis de la vitamina D, favorece la circulación sanguínea y nos hace sentir mejor y más alegres, una sobreexposición tiene efectos nocivos sobre la piel a corto y largo plazo. La piel tiene memoria.